Alberto Bernal:


«la música quiere volver a ser lo que siempre había sido: más que sonidos«

Dentro del Festival Ex Corde siempre hemos tenido el privilegio de contar con compositores relevantes del panorama actual para que nos cuenten sus inquietudes artísticas y sus experiencias, para permearnos de su imaginario creativo. En la primera de la -ya- séptima edición de las Jornadas de Creación Actual contaremos con el compositor o artista sonoro Alberto Bernal (Madrid, 1978).

Fernando López: ¡Hola, Alberto! Es un placer compartir tus ideas acerca de la música –y de, en palabras del entrevistado, “lo otro”– dentro del Curso-Festival Ex Corde. Este proyecto ha ido evolucionando hacia la integración de las artes escénicas y el diálogo con espacios de concierto no convencionales, así que ¡Estamos encantados de tenerte aquí! ¿Qué consejo darías a los alumnos de cara a la preparación del concierto-performance por diferentes espacios de Molina?

Alberto Bernal: Hola, un placer compartir con todos vosotros. De cara a ese el concierto que me comentas, creo que algo fundamental cuando se plantea algo «por» un espacio y no simplemente «en» un espacio al uso, es pensar que ese espacio tiene y comunica ya algo de por sí, al contrario de los espacios habituales de concierto, cuya finalidad es ser tan transparentes como invisibles (inaudibles). Los espacios no-convencionales tienen la riqueza de dialogar de tú a tú con la música que se hace en ellos y, por tanto, lo más importante es, como en cualquier conversación, saber escuchar.

F. L: He leído en un artículo tuyo que consideras que el timbre musical es un elemento sobreexplotado, del que quizá ya hemos agotado todas sus variantes. ¿Qué supone esto para los compositores y las músicas actuales? ¿Qué cambio de paradigma supone para los instrumentistas?

A. B: Como también digo en el artículo, hay un gran número de propuestas de corte específicamente tímbrico por las que siento una gran inclinación. Pero lo que reivindico es que el timbre es una opción más, como puede ser el color en el cine o en la fotografía, y creo que en lo que entendemos por música contemporánea se ha convertido en un cliché. Hay mucho por descubrir más allá de la mera fascinación por el color y el timbre. Para los instrumentistas, en realidad, no tiene por qué suponer un cambio de paradigma, simplemente el estar abiertos a músicas que ya no buscan encontrar el enésimo recurso tímbrico del instrumento. En cierto sentido, es como si el instrumento dejara de ser un fin en sí mismo para volver a ser simplemente un instrumento al servicio de algo más allá de su propia condición.

F. L: Alberto, tu música está ligada a elementos muy variados; performáticos, audiovisuales, conceptuales, filosóficos, podríamos hablar de interdisciplinariedad o quizá mejor de transdisciplinariedad, en tanto que todos los elementos se afectan entre sí, integrándose. ¿Desde dónde planteas el punto de partida de una nueva obra?

A. B. Más que inter- o transdisciplinariedad, a mí me gusta hablar de antidisciplinariedad. Es decir: el no partir de la base de que porque soy compositor y tengo un título que lo atestigua tengo que componer música sin más. Me gusta plantear las nuevas obras desde la apertura hacia el trabajo con lo que en ese momento considero mejor para la idea que esté desarrollando, en ocasiones puede ser sonido sin más, pero otras muchas veces siento la necesidad de incluir elementos visuales, performativos o de otra índole, cosas que están fuera de mi disciplina.

F. L: Más allá del concepto de música pura –que parece en extinción- ¿Crees que asistimos al fin de lo puramente sonoro?

A. B: Es difícil dar una respuesta objetiva de esto, dentro de unos años se verá. Pero sí tengo la sensación de que, tras un letargo de unos setenta años (exactamente desde la eclosión de la grabación solo sonora), la música quiere volver a ser lo que siempre había sido: más que sonidos.

F. L: En todas las sociedades y épocas la música –y el arte- son, o han sido, un reflejo de las preocupaciones de la sociedad de cada momento. ¿Crees que en la música actual esto es más evidente? ¿Qué implicaciones tiene esto en tu música?

A. B: En mi caso particular, es una cuestión de coherencia conmigo mismo. Al igual que puedo sentir preocupaciones de índole personal que, lógicamente, pueden reflejarse en mi música, también tengo (yo y supongo que cualquier persona) preocupaciones de índole más social o sociopolítica. Que eso también se refleje en mi música es, para mí, simplemente inevitable.

F. L: Y por último, ¿qué pregunta te hubiera gustado contestar y nunca te han hecho?

A. B: Pues, a decir verdad, no lo he pensado. Pero ya que lo preguntas, puedo esbozar una para la ocasión: ¿Tienes algo más que decir? Sí, y lo diré este lunes 15 en mi ponencia «La música más allá de la escucha» a las 19:00 en el Museo Comarcal de Molina de Aragón;

Estamos deseando descubrir lo que se encuentra más allá de la escucha en tu ponencia ¡Seguro que nos abres senderos musicales –o no musicales- interesantes! ¡Gracias y que sigas regalándonos experiencias estéticas!

Fernando López-Andújar

Cuarteto Ex Corde